jueves, 26 de abril de 2012

Una vuelta por el desierto

En diciembre del 2011 y hasta el 2012, junto a Rosita, mi eterna compañera de aventuras, recorrimos prácticamente toda la región de Atacama en camioneta, bajo el marco de un proyecto CONICYT de recolección de plantas para su uso en experimentos de extractos naturales. La gestora de todo fue Rosita, quien ganó el trabajo en Santiago, solicitó los fondos, y me incluyó como parte del staff para realizar la salida a terreno. El grupo de terreno eramos nosotros dos: la botánica y yo, su ayudante chofer y fotógrafo.


Los objetivos del proyecto eran recolectar una buena cantidad (unos 4-5 kg) de plantas con las q querían trabajar en la U de Chile, y como Rosita es la experta botánica en la región de Atacama, ella tenía q buscarlas, determinarlas, clasificarlas, y enviarlas a Santiago. El problema fue q 5 de las 6 plantas solicitadas, estaban vulnerables o en peligro de extinción, y más encima estaban dentro de parques nacionales. Por lo tanto, aparte cometer un delito por sacar plantas en extinción, teníamos q hacerlo desde lugares protegidos... doble delito (Glup!). La sensación era parecida a la q debe sentir un chino empleado trabajando para las balleneras q dicen hacer "Caza científica". Claaaaaaro... pero q le vamos a hacer... lo mejor q podíamos hacer, era podar las plantas sin matarlas, si es q era posible... pq obviamente como estaban en peligro de extinción, no habían muchas.

Por lo tanto, diseñamos un recorrido por la región del desierto más árido del mundo, q nos permitiera buscar 6 agujas en ese pajar.
Primero, al Parque Nacional Nevado Tres Cruces. Partimos temprano por la mañana (bueno temprano como a las 9 jaja), y subimos hacia la cordillera hasta la mina San Luis, en donde tuvimos q pedir permiso para poder atravesarla, escoltados por ellos. Antes de la mina, recorrimos un poco el lugar (a unos 3000 msnm), y encontramos una de las plantas q buscábamos... q suerte! bueno y el ojo entrenado también ayuda jeje.

Vista hacia la cordillera cerca de la mina San Luis, justo antes de encontrar la planta  #1

 
Y rematando a la pobre planta q lucha por no extinguirse...

Luego continuamos ascendiendo hasta la entrada de la mina, donde el dolor de cabeza por la baja tensión de oxígeno se cura con un puff de oxígeno (como un puff para el asma).. en 5 segundos pasas de un dolor bastante insoportable, a no sentir absolutamente nada... una verdadera sensación de alivio.

Azul profundo

Al llegar al otro lado de la mina, tomamos el camino para llegar al Parque. El parque es bellísimo, esta en la cordillera de Domeyko (parte norte de la Cordillera de los Andes Chilena) y en ella se encuentra el volcán más alto del mundo, el Ojos del Salado. Según la información disponible del parque, la flora no es muy abundante, pero yo creo q esto lo dicen haciendo un promedio considerando todo el territorio protegido, puesto q en las partes húmedas, y principalmente alrededor de las lagunas, esta todo siempre verde, con una gran diversidad de flora adaptada a la alta radiación UV, la sal, y los cambios extremos de temperatura entre el dia y la noche.

Laguna Negro Francisco, mirando hacia la cordillera. No se si será la altura o el poco oxígeno, pero los paisajes ahi arriba se ven IN-CRE-I-BLES (asi son las silabas??)

Ese mirador es como para mirar lo q ya se ve desde todas partes, pero de una manera mas oficial... desde "el mirador", jajajaja. Bueno, es casi toda la infraestructura turística q tiene el parque, aparte de los caminos.


Además, en estas mismas zonas hay una gran diversidad de fauna, entre pájaros y mamíferos de diversos tamaños. No pudimos quedarnos a mirar mucho más en detalle, pero alcanzamos a ver lo más representativo.

Vicuñas pastando, estas malditas me escupieron una vez en un zoológico.. aunq las comprendo, ya q un zoológico no tiene nada de lógico.

Luego pasamos a la Laguna Santa Rosa, q es otro gran atractivo del parque. El viento en este lugar es tan fuerte, q puede sostenerte sin mucho esfuerzo. Es muy interesante proyectar un parque eólico en lugares así (fuera del área protegida, por supuesto), ya que el viento es una de las propiedades constantes en zonas de alta montaña.

Rosita haciendo un esfuerzo por caer al suelo sin éxito.

Laguna Santa Rosa. Todo lo blanco es sal.

Flora alrededor de la laguna, como pueden ver, de escasa no tiene nada. Lamentablemente, ninguna de estas plantas eran parte del proyecto.


Una parina, o flamenco chileno. Hay 3 especies de estas aves en este lugar, y se les puede ver caminar sobre el agua antes de despegar.

Viajamos luego hasta Chañaral donde alojamos, y partimos temprano el dia siguiente al Parque Nacional Pan de Azúcar. Este parque queda en la costa, entre la 3º y 2º regiones. Las playas más hermosas q he visto están en este lugar. Lamentablemente no nos detuvimos mucho a mirarlas. Aquí si encontramos las plantas q buscábamos.

Un cactus. No es lo q buscábamos, pero es uno de los emblemas del parque Pan de Azúcar, q tiene más de 100 especies de cactus endémicos.

Hay montones de rocas en esta costa, por donde se forman verdaderos muros mirando la playa. Mas al Norte dentro del mismo parque, estas rocas se convierten en un acantilado de la muerte.


Esta no es una de las plantas q buscabamos, pero yo creía q si y por eso la fotografié para q la mirara la experta

Esta tampoco, pero yo tambien creí q era y la mire para ver su aprobación

Esta nada mas la fotografié para probar el macro de la cámara.

La experta creyendo q encontró una planta q buscaba. 

En Pan de azúcar existe un lugar llamado el mirador (vaya q son imaginativos quienes bautizan estos lugares) ubicado en la cresta de un barranco de casi 500 m de altura justo al borde del mar (un precipicio de esos en q uno dice como románticamente: "si yo me quisiera suicidar, lo haría desde aquí", con cara de satisfacción por lo hermosa q es la vida), y q funciona como barrera natural para el viento, impidiendo q la camanchaca entre (niebla matutina q se produce por la evaporación del agua de mar, y los vientos alisios q la arrastran tierra adentro). En este punto la camanchaca se acumula de tal manera, q se forma una verdadera nube justo sobre el mar, hasta donde se pierde la vista, y da la impresión de q se estuviera descendiendo desde lo alto hacia una tierra vestida de novia (y de blanco la patuda). Si el cielo católico existiera, yo creo q empezaría allí. No fuimos a ese mirador en esta oportunidad, pero es un sitio más q recomendable.

Después de terminar de recorrer Pan de Azúcar, viajamos de vuelta al sur, para iniciar el recorrido del parque nacional costero Llanos de Challe. En el camino pasamos por Caldera, ciudad puerto de gran tradición gastronómica, la cual pusimos a prueba. Aprobada con excelencia. Además, aprovechamos de visitar el zoológico de piedra (o museo del viento, o valle de las tinajas...como sea), lo cual no fue una buena idea del todo.

El zoológico de piedra es un sitio geológico muy interesante, puesto q son floraciones de rocas de granito erosionadas por el viento, y q forman estructuras muy interesantes para las mentes inquietas... o estimuladas.
Lo interesante de este lugar es el silencio, pq a pesar de estar a escasos metros de la carretera, se puede escuchar el silbido del viento atravesando las rocas, desprendiendo pequeños trocitos, y esculpiendo ilusiones en formas de tortugas, ballenas, jirafas, elefantes, y hasta monstruos (ya depende del tormento de cada uno)

Un pingüino con mirada acusadora

Este esta difícil... era algo en ese momento pero ya no lo recuerdo

Ah este es fácil... una culebra engullendo a la Rosita

A la izquierda un monstruo con la boca abierta, y a la derecha una tortuga levantando la cabeza

Un monstruo comiendose la ensalada

Una cobra amenazante

Unos tenebrónidos en multiplicación

Y lo malo... nos quedamos enterrados en un arenal.

Luego quienes nos vinieron a rescatar se quedaron enterrados también... nos sacamos y nos enterramos 3 veces más esa tarde.


Finalmente, cuando pudimos continuar, nos fuimos a Caldera de fiesta con nuestra amiga Ivonne, en un lugar al lado de la playa. Al día siguiente, bien temprano nuevamente (a las 9), continuamos el viaje hacia el parque Llanos del Challe. En este parque se encuentra la Garra de León, una de las plantas más raras y protegidas de Chile. Menos mal q no estaba en nuestra lista!. En este parque hay una gran variedad de flora nativa y endémica (q sólo se encuentra en esta región del mundo), y esto es debido principalmente a la camanchaca. 

Una almohada de flores en medio del desierto

Quien fuera a creer q esta imagen es del desierto mas árido del mundo... son las vueltas q da la vida

Con un destello de vida, el desierto florido nos enseña q en este mundo no hay nada definitivo



La vista en el parque es fabulosa, con una gran playa de arenas blancas, y una alfombra de plantas hasta ella 


 La botánica en acción, contenta por encontrar lo q buscaba
A la salida sur del parque se encuentra el valle del Huasco (donde claramente compramos el mejor pisco del  mundo, y el mejor aceite de oliva del mundo). 



Y así terminó esta desértica vuelta, llena de buena comida, lindos paisajes y bonitos recuerdos.

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